Desde el reporte de la aparición de neumonía atípica en el distrito de Wuhan, provincia de Hubei-China, el 31 de diciembre del 2019 y debido a su acelerada expansión, muchos países se han visto afectados la nueva enfermedad COVID-19 producida por el SARS-CoV-2. Debido a ello la Organización Mundial de la Salud (OMS) elevó la situación a pandemia el 11 de marzo del 2020. En el Perú, se confirmó el primer caso de coronavirus el 6 de marzo de 2020 y la cifra de casos positivos, en el mes de julio, superaba los quinientos mil casos y más de veinticinco mil fallecidos; actualmente la cifra es mayor. Hasta la fecha se han probado distintos fármacos; sin embargo, ninguno ha demostrado ser totalmente eficaz y otros aún se encuentran en estudio; y en el caso específico de la automedicación se puede producir interacciones medicamentosas y reacciones adversas, convirtiéndose en un problema de salud. Por otro lado, como parte de las prácticas de autocuidado se contempla el uso de terapias no convencionales, alternativas o tradicionales, tales como el uso de medicina natural o prácticas de meditación y yoga, las cuales poseen impacto positivo como la reducción de gastos, una menor demanda de acceso a servicios de salud; pero a su vez la práctica frecuente no supervisada puede enmascarar y agravar el proceso de la enfermedad o bien dar un diagnóstico y tratamiento inadecuado. Actualmente debido al estado de emergencia por la pandemia de COVID-19, la falta de un tratamiento o manejo terapéutico específico, hospitales colapsados y desabastecidos de recursos humanos y hospitalarios, centros de asistencia primaria inoperantes, empresas prestadoras de salud con ofertas económicamente elevadas, entre otras características, se propicia un ambiente que puede inducir a la población de estudiantes de medicina y a los miembros de sus hogares en optar por el uso de autotratamientos como moléculas farmacológicas o de terapias procedentes de la medicina tradicional para tratar o prevenir el COVID-19. Por ello, es relevante identificar los diversos tratamientos de la medicina tradicional, sabiendo que el mal uso podría generar efectos adversos y complicar el estado de salud de un sujeto, efectos adversos como intoxicaciones, resistencia bacteriana, o agravamiento de comorbilidades preexistentes. Ante la falta de información de esta problemática, en este estudio se identificará las principales características de terapias convencionales y no convencionales para COVID-19 en los hogares de estudiantes de medicina. Los resultados obtenidos en esta investigación generarán evidencia útil para la vigilancia en el tratamiento de COVID-19. OBJETIVOS Objetivo general Identificar la frecuencia y las características del tratamiento para COVID-19 con terapias convencionales y no convencionales durante el estado de emergencia sanitaria, en una muestra de hogares de estudiantes de medicina de cinco regiones del Perú. Objetivos específicos • Identificar y tipificar síntomas sugestivos de COVID-19 en hogares de estudiantes de medicina de cinco regiones del Perú durante el estado de emergencia sanitaria del 2020. • Determinar casos positivos de COVID-19 en hogares de estudiantes de medicina de cinco regiones del Perú durante el estado de emergencia sanitaria del 2020. • Describir los tipos de autotratamiento convencional y no convencional para COVID-19 en los hogares de estudiantes de medicina de cinco regiones del Perú durante el estado de emergencia sanitaria del 2020. • Delimitar los tipos de tratamiento convencionales y no convencionales para COVID-19, utilizados bajo prescripción, en los hogares de estudiantes de medicina de cinco regiones del Perú durante el estado de emergencia sanitaria del 2020. • Determinar las características clínico-epidemiológicas en hogares de estudiantes de medicina de cinco regiones del Perú durante el estado de emergencia sanitaria por COVID-19 del año 2020. MATERIALES Y MÉTODOS El estudio es de enfoque cualitativo, en el que lo