La tuberculosis resistente a múltiples fármacos (MDR-TB) pone en peligro el control mundial de la tuberculosis y la transmisión de esta infección es la responsable de más de la mitad de los casos existentes. Los hospitales y otros entornos de congregación son focos comunes de transmisión, incluyendo la propagación a los pacientes y trabajadores de la salud (TS). En la época de TB resistente, multiresistente, extremadamente resistente a fármacos (XDR) y VIH, las consecuencias son mortales. Existe evidencia previa de que la transmisión no proviene de los pacientes con TB que se encuentran recibiendo tratamiento efectivo pero sí de los casos insospechados y de los casos con resistencia a los fármacos insospechada. Las directrices internacionales integrales fomentan el diagnóstico temprano, pero el enfoque tiende a ser los casos conocidos y sospechosos, controles ambientales y protección respiratoria del personal. Sin embargo, la vigilancia activa en una sala de medicina general en un gran hospital universitario de Lima por un año, encontró que un tercio de los casos de TB con cultivo positivo eran insospechados, incluyendo casos de MDR de frotis positivo. En Perú, el tiempo promedio para el diagnóstico y tratamiento de la TB-MDR es de 168 y 251 días, respectivamente. No obstante, en condiciones operativas actuales, todavía se tarda entre 5 y 10 días obtener resultados de cualquier prueba inicial de TB (sólo para determinar si un paciente tiene TB). Con más frecuencia, la TB-MDR se diagnostica (o TB-DS se confirma) en 6 semanas semanas más después de la fecha de la prueba inicial, cuando los resultados de DST basados en cultivos están disponibles. Estos retrasos se traducen en períodos infecciosos extremadamente largos, sin contar a los pacientes infecciosos insospechados para los cuales ni se inician los diagnósticos.

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