La diálisis peritoneal (DP) ha estado en uso durante los últimos treinta años para el tratamiento de la enfermedad renal en etapa terminal, pero salvo en algunos países, la prevalencia de DP es menor que la Hemodiálisis (HD).
Según los datos de USRDS de 2007, de aproximadamente 368,000 pacientes sometidos a diálisis en los Estados Unidos (EE. UU.), la prevalencia puntual para pacientes con DP fue solo del 7,2% [1].
Contrariamente a la práctica prevaleciente, una encuesta de profesionales de la nefrología encontró que la mayoría eligió CAPD / APD como la mejor terapia inicial para el paciente [2].
De los pacientes que realizan DP, pocos pacientes permanecen en DP durante 5 años o más desde el inicio de la terapia. Una gran proporción de estos pacientes se transfieren de DP a HD cada año, y se han informado tasas de cambio de más del 35% anual., [3, 4].
Por lo tanto, la transferencia a HD es una causa importante de la baja prevalencia de DP.
El riesgo de transferencia es el más alto en los primeros meses de iniciación de la DP, principalmente debido a episodios de peritonitis y problemas relacionados con el catéter, y disminuye a partir de entonces [5].
Episodios recurrentes de peritonitis, diálisis inadecuada, falla de ultrafiltración, junto problemas del sistema sanitario ( falta de infraestructura y personal capacitado) o razones sociales constituyen la mayor parte de las causas de la transferencia a HD .
La peritonitis y los problemas de diálisis inadecuados han recibido una gran atención y, a pesar de que las incidencias han disminuido en los últimos años, el abandono de la DP por estas causas sigue siendo generalizado.
Las estrategias para prevenir y controlar la peritonitis, la falla por ultrafiltración y la consiguiente sobrecarga hídrica , las complicaciones relacionadas con el catéter y la mejora de la adecuación de la diálisis junto con la educación de los recursos humanos y de los pacientes evaluando sus aprendizajes pueden ayudar a mantener al paciente en DP y aumentar la prevalencia y los resultados de la técnica.
La dificultad para el crecimiento de la DP tal vez no solo este en una mayor número de pacientes que ingresen a la técnica si no en que menos la abandonen en al año. La transferencia a HD parece estar relacionada con la capacitación recibida, el método educativo utilizado y la evaluación de las competencias aprendidas por el pacientes.
