Se estima que 4.3 millones de casos de tuberculosis (TB) no son diagnosticados a nivel global anualmente1, elevando los índices de morbilidad y mortalidad. El cultivo, a pesar de ser un método confiable para el diagnóstico de TB, puede tomar de semanas a meses el obtener resultados2,3, además que en muchos países en desarrollo no cuentan con los recursos necesarios para establecer un laboratorio que cuente con las rigurosas condiciones requeridas para realizar cultivos de TB. En la mayoría de países la baciloscopía resulta ser la única opción para un diagnóstico de TB rápido. Sin embargo, la baciloscopía trae consigo un significativo riesgo biológico y no puede ser realizado en pacientes que no pueden producir esputo. Además, cuando se realiza la baciloscopía, solo puede ser detectado mediante este método un 45% de los casos4-8. Por estas razones, el bajo costo y el diagnóstico rápido de TB, puede ser implementado en los puntos de cuidado del pacientes y puede ser empleado para seguir a los pacientes con síntomas de TB, por lo que su estudio e implementación es una prioridad. El aire expirado resulta ser un target atractivo para el diagnóstico de casos de TB pulmonar, debido a que las muestras de aire expirado podrían contener bacterias Mycobacterium tuberculosis (MTB) o biomarcadores específicos de MTB y podría colectarse mediante procedimiento no invasivos. Adicionalmente, tiene la ventaja de poder diagnosticar TB pulmonar en adultos coinfectados con VIH y en niños en cualquier nivel del sistema de salud, considerando que el diagnóstico convencional basado en el esputo muestra un bajo rendimiento entre pacientes de estas poblaciones. La prueba de diagnóstico ideal de aire expirado podría incluso diferenciar pacientes con tuberculosis activa de aquellos con otras patologías respiratorias. Rapid Biosensor Systems (RBS) ha desarrollado recientemente un analizador de aire expirado, el TB Breathalyser, portátil, no invasivo, de rápido diagnóstico capaz de diagnosticar TB en muestras de aire expirado obtenidas cuando el paciente tose (Figure 1). El TB Breathalyser está comprendido por un tubo dispensable de único uso para la colección de muestra y un lector multi-uso. En la parte inferior del tubo colector hay un bio-sensor de vidrio cubierto con un sensor bioquímico que se encuentra formulado de manera tal que reacciona con el bacilo de la TB. Los pacientes toserán en el tubo de colección luego de haber sido nebulizados con solución salina al 0.9%. Luego de la colección de la muestra, el tubo será colocado dentro del lector, donde un diodo laser evalúa el bioquímico en el revestimiento del tubo de colección de muestra y reportará la presencia del bacilo de la TB. Todo el proceso abarca alrededor de dos minutos. La compañía eNose ha desarrollado un artefacto de diagnóstico electrónico manual, no invasivo de rápido diagnóstico de TB denominado AeonoseTM. Este artefacto permite la detección de TB mediante el análisis del aire expirado por el paciente. Luego de que el artefacto es calibrado, se le explica al paciente como debe respirar dentro de este a través de una boquilla por 5 minutos. Dentro del artefacto se localiza un microsensor en forma de plato caliente de metal, el cual se comporta como un semiconductor a altas temperaturas. Las reacciones de reducción que ocurren en la superficie del sensor resultan en un cambio de su resistencia, los resultados pueden ser leídos e interpretados mediante una aplicación de celular para confirmar la presencia de MTB. A pesar de que estas diferentes técnicas han demostrado buen rendimiento en sus diagnósticos en evaluaciones de campo iniciales9,10, es requerida mayor evidencia del rendimiento y características operacionales de ambas técnicas en ensayos de campo conducidos de independientemente de los fabricantes. Dada la necesidad de nuevas técnicas de diagnóstico de TB rápidas en los centros de cuidado, resulta de suma importancia evaluar el rendimiento del diagnóstico de las téc